Porque tú has sido luz en mis días grises
porque fuiste alegría donde ya no había esperanza
porque emprendiste un camino a mi lado
y diste paz entre tanta nada.
Porque fuiste capaz de cambiar un pensamiento
tan solo ofreciendo una mirada.
Porque el roce de tu mano era alimento
para elevar hasta el cielo mi alma.
Gracias por tanto amor encerrado
en tan pocas palabras.
No es necesario decir "te quiero"
si los ojos son los que hablan.
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